Una escalofriante araña de largas patas de color negro, que porta en su cabeza, lo que parece ser un cráneo humano de pequeñas dimensiones.
¿Cómo sabemos que es humano? Porque las arañas, al igual que todos los artrópodos e insectos, carecen de huesos. Es por eso, que es totalmente imposible que ese cráneo le pertenezca.