Un retrato creado por el artista Neto Lobo en el estudio brasileño Curitiba-Pr, en el que aparece representada una de las pintoras más impresionantes que ha dado México, Frida Kahlo.
Retrato, en el que se han dulcificado los duros rasgos de Frida, el cual se completa con una pareja de rosas amarillas sobre su pelo y un pequeño broche esmeralda.