Otra de las mujeres horrorosas, diseñadas por la mano del artista Timur Lysenko, en las que su rostro se transforma en una horrenda máscara llena de detalles muy poco agradables.
Rostros, que no presentan ningún tipo de expresión, en los que se suele prescindir de los ojos y algún otro elemento, como por ejemplo la boca.