Si estás a punto de ir por primera vez a que te tatúen, seguramente ya has consultado cosas sobre lo que no debes de hacer antes de tatuarte (y si no, de una vez ve nuestro post al respecto), y seguramente has visto cosas sobre cómo te deberás cuidar tu tatuaje después de la sesión (y si tampoco, bueno, se nota que no te interesa obtener un tatuaje, pero igual léete un poco sobre cómo se cura un tatuaje). Pero lo que no muchos piensan es ¿Cómo debes de comportarte con tu artista del tatuaje?
Sí, se trata de un servicio, y todos los tatuadores te tratarán con amabilidad y mucho respeto, serán atentos a todo lo que les digas, pero el cliente también debe de hacer su parte. Así que a continuación te decimos algunas cosas que debes de considerar antes, durante y después de ir con tu tatuador.
Agenda tu cita con tiempo. Hay estudios que tienen lista de espera de meses enteros, por lo que debes de agenda tu cita con tiempo, y por lo que más quieras, se puntual. Cada estudio maneja sus propias políticas, pero dejando eso de un lado, si necesitas cancelar la cita hazlo con tiempo.
Lleva compañía, pero no a toda la familia. Los estudios de tatuaje no son parques de diversión, por lo que la mayoría de ellos te permiten que alguien te acompañe. Se consciente que no serás el único en el estudio y procura no invitar a todos tus amigos y a la abuelita para que te vean en el estudio mientras te tatúan. Por otro lado, considera que en muchos locales hay una sala de espera que está afuera de donde te tatuarán, por lo que no tendrás contacto con tu acompañante en todo momento.
Los tatuadores son artistas y viven de su trabajo. No regatees el precio de los tatuajes, es de mal gusto. Y como siempre lo digo: un buen tatuaje no es barato, y un tatuaje barato no es bueno. Procura acordar un precio estimado antes de empezar la sesión, y ve por dinero al cajero antes de que comiencen a trabajar en tu tatuaje. Vamos, no todos los estudios aceptan tarjetas de crédito, y nadie quiere acompañarte al cajero automático.
El tatuador define sus trabajos. Sí, el tatuador cumple un servicio, pero tiene el derecho a hacerlo a su manera. Los tatuadores pueden tener criterios para elegir o rechazar propuestas de trabajo, esto dependerá de cada quien. Si un artista no acepta tu propuesta de trabajo, no te ofendas, esas cosas pasan.
Por último no pidas un diseño para que alguien más te lo tatúe. Créelo, esas cosas pasan y no son divertidas.
¿Algo más? Ah, sí. Procura ir tranquilo, cualquier cosa platica con tu tatuador, la mayoría son gente agradable, platicadora e incluso divertida.
Fin.