Un retrato del artista español Salvador Dalí. Se le ve con los ojos cerrados y con su peculiar bigote alzado, que como el contara una vez, lo lograba con miel de abeja, según eso para poder atraer moscas y comérselas. Indudablemente Salvador Dalí era un gran artista, casi iguald e grande que como loco estaba.
Tatuaje realizado por Denis Sivak.